Los proyectos nos han acompañado durante toda nuestra historia, desde la mítica construcción de el arca de Noé y la construcción de las pirámides egipcias o aztecas, hasta la construcción de la estación espacial internacional. Y esto es así, porque por su propia definición (y aquí me refiero a la que propone el PMI, aunque sólo hay ligeros matices entre éste y otros autores), los proyectos constituyen una abstracción racional de la agrupación de todas las actividades encaminadas a la consecución de uno o varios objetivos tangibles. Desde este punto de vista, muchas actividades del hombre prehistórico, antiguo o moderno, se pueden entender como proyectos. Sin embargo no vamos a hablar de la historia de los proyectos en general sino de la historia de la gestión de los mismos y para ello es necesario identificar un punto de partida. Dos siglos de preparación (1750-1900) De acuerdo al post anterior " Un poco de historia... ", podríamos situar nuestro primer punto de inflexión...